Mitos y malentendidos: La meditación - Eduardo Broggi.



MITOS Y MALENTENDIDOS: LA MEDITACIÓN (Eduardo Broggi)

Unas claves para arrojar un poco de luz sobre lo que es y lo que no es la Meditación.

MEDITAR NO ES…

…DEJAR LA «MENTE EN BLANCO» porque es misión imposible dada la naturaleza compulsiva de la mente. Lo que se hace es retirar la atención del contenido mental (pensamientos, sensaciones, emociones) poniéndola en el testigo. De esta manera, siendo testigos, vemos pasar el contenido mental como si fuese una película, sin involucrarnos. Nos damos cuenta de que no somos lo que pensamos.

…IMAGINAR BAÑARSE EN UNA LUZ DORADA (O DE CUALQUIER OTRO COLOR) porque esta técnica de imaginarse cosas o situaciones se llama visualización. Podemos crear con la fantasía de nuestra mente experiencias muy relajantes pero no se trata de meditación.
Puede ser de ayuda, un primer paso para aquietar la mente, para después poder entrar en Meditación.

…FIJAR LA MIRADA EN UNA VELA O EN CUALQUIER OTRO OBJETO pero es un buen entrenamiento de concentración utilizando el sentido de la vista para que la mente deje de divagar tanto y se centre en un punto.
Otro sentido sería el oído: escuchando una música tranquila o gongs no estás meditando, pero sí SE entrena la mente para fijarse en la música y nada más.
Puede ser una buena preparación para aquietar la mente y poder “entrar” en Meditación.

MEDITAR NO ES…

…CANTAR MANTRAS porque, a priori, cantar es cantar, no es meditar. Sí que puede ser una preparación para aquietar la mente. Puede ser un preludio de la Meditación.
A no ser que se lleve a cabo en un estado meditativo, pero eso no suele pasar a menudo.

…ESTAR EN SILENCIO, ES DECIR, SIN HABLAR, DURANTE X TIEMPO (MINUTOS/HORAS/DÍAS) porque la meditación sólo tiene que ver con el silencio interior, con silenciar la mente. Un silencio exterior (estar sin hablar, estar en un lugar sin ruidos) puede facilitar las cosas, sobre todo al principio, pero no es esencial para la meditación. El ruido mental en tu cabeza puede ser más fuerte que el ruido de la calle.
De hecho, una persona muy entrenada en Meditación puede incluso estar hablando y en meditación al mismo tiempo.

…UNA ACTIVIDAD QUE SE PRACTICA ALGUNAS VECES POR SEMANA porque de entrada no es una actividad. Meditar es dejar de pensar, es dejar de identificarnos con el personaje/la mente/el ego.
Se trata de invertir las cosas: en lugar de pensar constantemente, que es lo que solemos hacer, se trata de aprender a pensar solamente cuando sea adecuado y necesario.
Sí que es verdad que, sobre todo al principio, debemos dedicarle tiempo y espacio para aprender a meditar (atendiendo a cursos o retiros impartidos por alguien que realmente sabe, que no sólo ha leído libros sino que tiene experiencia propia), para aprender a entrar en ese espacio que está justo un poco más allá de la «cortina de humo» de la actividad mental.

MEDITAR NO ES…

…UNA «TRANSFORMACIÓN» EN UN FIN DE SEMANA, COMO PROMETEN ALGUNOS. No, francamente esto es una tontería. No hay atajos milagrosos. La práctica meditativa es un camino que hay que andar, y nos lleva a casa. No te transformas en nada nuevo; vuelves a darte cuenta de tu verdadera esencia, de Quién Eres realmente.
Al principio, este camino requiere constancia y entusiasmo, como cuando un@ quiere aprender a tocar el piano. Dedicando un fin de semana de vez en cuando no te harás pianista. Se requiere dedicación diaria. ¡Es necesario que se vuelva prioritario en tu vida!

…PONERSE METAS Y DISEÑAR UNA HOJA DE RUTA PARA LLEGAR AL SILENCIO MENTAL. Ojo, sí que hace falta disciplina (constancia y entusiasmo) para crear el nuevo «hábito» de meditar, de retirar la atención de la actividad mental y colocarla sobre nosotros mismos. Pero, ojo con metas y expectativas. Si quieres lograr algo, ¡este deseo viene de tu mente!!!

MEDITAR SÍ ES…

…donde empieza el fin del sufrimiento. Dado que en el estado meditativo no hay actividad mental, no hay deseos ni rechazos. Hay una comprensión muy profunda que Todo Es como Es, ni bueno ni malo (que son valoraciones que le pone nuestra mente).

…descubrir Quién Soy de verdad, más allá del personaje que tiene nombre, forma, cuerpo, edad, profesión, familia, relaciones sociales, dinero, posesiones, creencias… Tenemos esos atributos, pero no somos esos atributos.

…descubrir cómo es la Vida sin la intermediación de la mente, sin etiquetas, sin discursos mentales. Se vuelve a aprender la Percepción Pura. Vivir la vida en lugar de pensarla.

…volver a ser como los niños pequeños, con una actitud de sorpresa y asombro continuos. Así es como se entra en el «Reino de los Cielos».

 MEDITAR SÍ ES…

… vivir la vida en un estado meditativo, activando el pensamiento sólo cuando es conveniente. Es decir, invertir la costumbre que tenemos de estar pensando siempre.

…salirse de la dualidad y experimentar el ADVAITA = la no-dualidad, donde el testigo y lo atestiguado (el sujeto y el objeto, el observador y lo observado) son no-diferentes, no-dos, son Uno. Se experimenta que el mundo que aparece tan separado es solo una apariencia, realmente no es así. Como cuando te despiertas de un sueño y dices «Aahhh, ha sido solo un sueño…»

…habitar la Presencia. Si «me voy» al pasado o al futuro es mental. Meditando siempre estoy en el Presente, siempre Soy.

salirse del personaje y vivir desde el Ser, desde nuestra Esencia, desde la Consciencia.

 CÓMO SE MEDITA

INTERIOR: Con los ojos cerrados adoptas interiormente la postura de testigo y ves pasar la “película” de los pensamientos sin identificarte con ellos. Entonces te deslizas en la pequeña pausa o brecha que se abre entre un pensamiento y el siguiente. Se trata de entrar en esa brecha, más allá del mundillo mental, para descubrir un espacio inmenso, desconocido e insospechado, de Quietud y Paz absoluta.

EXTERIOR: Con los ojos abiertos contemplas cualquier objeto externo, te vas fundiendo con el objeto: el sujeto (el que observa) deviene uno con el objeto (lo observado). Permaneciendo allí ya no hay diferencia entre el testigo y lo atestiguado, la percepción deviene no-dual. Con eso, se ha entrado en ese espacio de Paz y Quietud al cual la mente no tiene acceso.

Allí es donde empieza toda Meditación, lo que acontece anteriormente son preludios. Al principio, suelen ser vislumbres de segundos. Con entrenamiento y práctica, con entusiasmo y constancia, se aprende a permanecer cada vez más  «allí». Allí -siempre disponible para todas las personas- está esa Paz-Consciencia-Existencia-Bienaventuranza Absolutos de una “textura”, “sabor” e inmensidad que no se conocen en el mundo dual.

Tomado de:  https://www.eduardobroggi.com/blog/mitos-y-malentendidos-la-meditacion/

Espiritualidad Pamplona-Iruña : https://www.espiritualidadpamplona-irunea.org/

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