Shin Jin Mei (10/..)
Nuestro espíritu,
cuando permanece tranquilo
se desvanece
espontáneamente.
Sí nuestro espíritu permanece tranquilo en su condición normal, se desvanece naturalmente, espontáneamente, como durante el sueño. Tal es la actitud durante zazen.
El Maestro Keizan escribió un celebre poema referente a este verso:
Las nubes blancas descienden y se desvanecen.
Sola, poderosa y alta, la cima de la montaña verde domina,
eclipsando los cien montes.
Nadie puede alcanzar esta cima,nadie puede conocerla.
Sola, poderosa y alta, la cima de la montaña verde domina,
eclipsando los cien montes.
Nadie puede alcanzar esta cima,nadie puede conocerla.
Durante zazen nuestro espíritu se vuelve transparente, puro. Vuelve a encontrar su condición normal. Esta es la razón por la que las nubes blancas desaparecen, y la gran montaña verde se yergue solitaria.
Comentarios
Publicar un comentario